Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
{{dayName}} {{day}} de {{monthName}} de {{year}} - {{hour}}:{{minute}} hs.
Dólar (BNA): $857,00 / $897,00
Dólar Blue: $1.020,00 / $1.040,00
Dólar CCL: $ / $
Dólar MEP: $1.052,31 / $1.053,19
Peso Chileno: $91,98 / $92,10
Columnistas

Cuatro errores de Larreta

El efecto automático de la renuncia de Mauricio Macri a la candidatura presidencial ha sido el alzamiento contra su autoridad de Horacio Rodríguez Larreta. El jefe de gobierno porteño quiere terminar con la tutela de quien hizo posible que sea candidato a presidente.

Por Sergio Crivelli
Por Sergio Crivelli

Su reacción no es injustificable, pero en ese intento comete al menos cuatro errores.

Uno, instrumental. Usa como palanca una alianza con los radicales que lo obliga entregarles la ciudad. La reacción adversa de Macri, Vidal y Bullrich y el apoyo de la UCR y Elisa Carrió reflejan el nuevo mapa opositor que pretende dibujar Rodríguez Larreta. Pulveriza al PRO, creación de Macri, para sustituirlo por un partido del hoy viejo y muy cuestionado sistema y una dirigente que hace años viene en declive y tiene hábitos incurables de francotirador.

El segundo error es el mensaje a los votantes antipopulistas. Al aliarse con la vieja dirigencia pone en duda cualquier posibilidad de enmienda en momentos en que la sociedad muestra en todas las encuestas que exige salir del ruinoso e inviable “statu quo”. Lo rentable electoralmente es no insistir con la “rosca”.

El tercer error es de oportunidad: Rodríguez Larreta quiere borrar a Macri antes de que las urnas lo ratifiquen como líder opositor. Lo aconsejable hubiese sido hacerlo después. Su problema no es el parricidio, sino que quiere enterrar vivo a su padre político.

Su cuarto error no es instrumental ni de oportunidad, sino de concepción. Su estrategia de ocupar el centro político resulta anacrónica. Hoy prevalecen los extremos. Hay un cuestionamiento creciente a las políticas “progres” o populistas de las que Rodríguez Larreta y sus socios radicales son tributarios. El aumento de la popularidad de figuras como Patricia Bullrich y Javier Milei atestigua ese fenómeno. La grieta está en la sociedad y quienes lo ignoren sufrirán la suerte de Manes o Schiaretti, cuyas candidaturas no pasan de testimoniales. Massa se dio cuenta hace rato; por eso se mudó al turbulento universo peronista. Ningún camino del medio está hoy transitable.

Existe, además, un factor personal. Rodríguez Larreta equivoca la receta electoral porque no es un líder, sino un organizador. Un dirigente que gestiona y administra los recursos públicos para consolidar un poder burocrático. Lo que tiene que demostrar en la etapa que comienza es carisma electoral propio. Tiene que probarse en la calle y abandonar un marketing que no funciona. Hay una mayoría consolidada que pide que los políticos se dediquen a buscar soluciones a la inflación, la pobreza y la inseguridad y no a maniobras de comité. En este marco la jugada de Rodríguez Larreta no parece la más adecuada a menos que esté viendo estancada su candidatura frente el avance de Patricia Bullrich y los libertarios. En ese caso el desafío significa quemar las naves y su resultado constituye una gran una incógnita.

Sergio Crivelli

Twitter: @CrivelliSergio

Interna del PRO Horacio Rodriguez Larreta Mauricio Macri elecciones 2023

Comentarios

Te puede interesar

Teclas de acceso