Se derrumbó parte del techo de un shopping ubicado a las afueras de San Pablo, Brasil, y causó pánico entre todos los presentes. En concreto, el estacionamiento instalado sobre el patio de comidas cedió y cuatro vehículos cayeron en el interior del lugar.

El impactante hecho ocurrió en la tarde del pasado miércoles en el centro comercial brasileño Osasco Plaza Shopping y no se registraron heridos, según reportó el diario Folha de São Paulo.

"Exigimos un informe técnico integral de la estructura del edificio", manifestó el funcionario y advirtió que "el ayuntamiento tomará todas las medidas que correspondan y sean necesarias".

Considerando que no hubo víctimas de milagro, el cuerpo de Bomberos explicó al respecto que esto fue gracias a que el patio de comidas del shopping se encontraba liberado a causa de un goteo. En este sentido, se puede ver cómo los clientes observaban la escena desde cierta distancia, apenas unos segundos antes de que el lugar se viera envuelto de una nube de polvo y escombros.

Por su parte, las autoridades que trabajaron en el lugar no descartan que pueden producirse colapsos inmediatos en otros sectores del centro comercial, por lo que equipos técnicos se encuentran supervisando las instalaciones.

"La gerencia sigue comprometida y brindará el apoyo necesario a los comerciantes y asiduos para volver a la normalidad", precisó luego la administración del centro comercial a través de un comunicado. De todas formas, hasta el momento se desconoce por cuánto tiempo se prolongarán las reparaciones necesarias para su reapertura.

Antecedentes

El centro comercial Osasco Plaza Shopping es el mismo paseo de compras donde el 11 de junio de 1996 se produjo una fuga de gas que derivó en una explosión que mató a 46 personas e hirió a otras 372 en el mismo patio de comidas donde se produjo el derrumbe.

En aquel momento, explicaron que el gas se filtró dentro del establecimiento durante un mes, llenando todo el espacio subterráneo y combinándose con el oxígeno, para luego producir el trágico hecho.

Por lo ocurrido, la Justicia de San Pablo condenó a cinco personas, aunque todas fueron absueltas por falta de pruebas.