El responsable de estos actos fue encontrado culpable de siete casos de abuso sexual, siendo la víctima su propia hija, una niña de corta edad a quien sometió durante varios años. Los hechos tuvieron lugar en el departamento Santa María.

Ayer por la mañana, en la Cámara Penal N°2, estaba programada la audiencia de sorteo de los posibles jurados para el Juicio por Jurados. Sin embargo, todas las partes presentes en el recinto, el fiscal Laureano Contreras y Augusto Barros, solicitaron suspender el sorteo.

Según fuentes judiciales consultadas, debido a la naturaleza sexual del caso, la prensa no pudo acceder a la sala. La defensa del imputado, representada por la defensora oficial Florencia González Pintos, se sumó al pedido de suspensión. Informaron al juez director del proceso, el Dr. Miguel Ángel Lozano Gilyam, que habían llegado a un acuerdo y que el imputado reconocería los hechos. En consecuencia, solicitaron que el juicio se lleve a cabo en formato abreviado.

El imputado, cuya identidad se mantiene en reserva para proteger la identidad de la víctima, se sentó ante el juez y admitió abiertamente los hechos, expresando su voluntad. Posteriormente, las partes presentaron las pruebas y presentaron sus alegatos finales.

Después de escuchar a todas las partes involucradas en el proceso, el juez Gilyam determinó que el sujeto era culpable como autor del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, en los siete casos mencionados. Como consecuencia, fue condenado a cumplir una pena de 17 años de prisión en el Penal de Miraflores.

Una vez concluida la audiencia y siguiendo el fallo condenatorio, el padre acusado de abusar de su hija fue trasladado al Penal de Miraflores, donde cumplirá la sentencia impuesta.