¡Azorados! Así quedamos los catamarqueños al enterarnos de la siguiente burrada del Vicegobernador de la provincia y titular natural del Senado provincial Rubén Dusso, al disponer nuevos nombramientos políticos. Estamos hablando de la necesidad de un reforma constitucional que contemple el sistema unicameral mixto y él acomete con esta decisión que además es arbitraria.

¿Sabrá Dusso que Nación sigue administrando las cuentas públicas con el presupuesto del 2023? Por lo visto no. ¿Y sabrá que las transferencias automáticas se redujeron notablemente y los giros discrecionales se suspendieron definitivamente? Semejantes patadas al gasto público solo hacen pensar que es un burro administrando la cosa pública, indefectiblemente.

Vale la pena recordar que esa cámara, precisamente, es la que está de más en nuestra provincia, la que reúne a 16 funcionarios carentes de representatividad, que generan un descomunal gasto, que bien podría evitarse e imitar lo que hizo Córdoba en 2001.

Si la reforma la constitución se plasma, como muchos dirigentes políticos están pensando, el poder legislativo de la provincia debería transformarse en un sistema unicameral mixto. Decíamos que Córdoba lo hizo, y fue una gran novedad. Catamarca tiene baja densidad de población y perfectamente podría tener una unicameral con 32 legisladores. Más no necesita.

Antes de seguir desarrollando nuestra opinión sobre las desatinadas acciones producidas en el senado, es necesario desasnar al burro, y traer a colación que en el año 2001, del mismo modo que en el actual 2023, en el país estábamos con un importante endeudamiento externo e interno.

Un Estado Nacional en virtual cesación de pagos, sumado a un Banco Central en bancarrota, más el crónico déficit fiscal y déficit operativo de caja, más el brutal endeudamiento en letras del tesoro, más planes sociales y subsidios de las tarifas públicas (léase atraso) y consecuente baja de inversiones en renovación de infraestructura, además de una baja actividad productiva y un grave proceso inflacionario, la Argentina transitaba y actualmente transita un proceso similar, aunque mucho más grave que aquel del 2001, una inocultable crisis económica, social y también política, creada por el mismo kirchnerismo, cuando no.

Ninguna provincia estaba ajena en aquella época, ahora la mayoría de las provincias lo tienen presente y están haciendo el ajuste, excepto Catamarca y su vicegobernador, que por lo visto son amantes del gasto público y de la máquina de hacer dinero, esa que genera los dolorosos procesos hiperinflacionarios como el que estamos viviendo.

El despilfarro de las cuentas públicas es una constante en Catamarca, sin embargo Rubén Dusso increibleme lo sigue ignorando a sabiendas del programa de shock y ajuste que había prometido el presidente Milei Y que ya esta en etapa de ejecución.

Por ello resulta incomprensible que Dusso haya apurado una sesión que resolvió aumentar el organigrama administrativo entre gallos y medianoche y haya dispuesto la creación de más cargos y el aumento del gasto público.

Como es público, el Senado que él preside agregó a su estructura tres nuevas secretarías y sus correspondientes subsecretarías. Hasta entonces, contaba solo con las mismas que tiene la Cámara de Diputados: Secretaría y Subsecretaría Parlamentaria y Secretaría y Subsecretaría Administrativa. Pero a partir de ese día sumó las siguientes: Secretaría y Subsecretaría Legislativa, Secretaría y Subsecretaría Institucional y Secretaría y Subsecretaría de Innovación Pública y Gestión Estratégica. Hizo los almohadones y de inmediato los rellenó.

El Senado levantó un montaje de película en pocos minutos para el juramento de los nuevos funcionarios, la temible casta, la que solo chupa de la teta del Estado sin solución de continuidad. Los nombres, según se leyó, fueron “propuestos por el vicegobernador, Rubén Dusso”. Y por lo tanto, nadie presentó objeciones.

La nueva estructura con sus respectivos responsables quedó de la siguiente manera:

Secretaría Parlamentaria: Franco Guillermo Dré. Subsecretaría Parlamentaria: Damián Vega Anchetta. Secretaría Administrativa: Geraldine Gasó. Subsecretaría Administrativa: Alina Chayle. Secretaría Legislativa: vacante. Subsecretaría Legislativa: José Ignacio Rivera. Secretaría Institucional: Julio Macedo Subsecretaría Institucional: Pablo Correa. Secretaría de Innovación Pública y Gestión Estratégica: vacante. Subsecretaría de Innovación Pública y Gestión Estratégica: Gretel Galeano.

En Catamarca, la casta no tiene miedo, por ahora... estos nombramientos deberían caducar en haras del presupuesto base cero que propone el presidente Milei y le sobran razones y motivos para hacerlo, aunque al burro no le importe nada. Solo su quinta y el bienestar de su tribu y que el pueblo se siga empobreciendo. Lamentable.